Mapas mentales: la mejor técnica para el estudio
Seguro que alguna vez mientras estabas intentando estudiar, has terminado bloqueándote porque había demasiados conceptos que no sabías cómo recordar o te has hecho un lío con los epígrafes de algún tema. A todos nos ha pasado.
Por eso en la entrada de hoy te traemos la solución para mejorar de forma exponencial tu productividad a la hora de estudiar: los mapas mentales. Un mapa mental es una herramienta realmente útil que permite la asociación de ideas de forma rápida y visual.
Para qué sirven los mapas mentales
Tiene muchas utilidades prácticas, ya que sirve para:
- Planificar tareas. Ubicando el objetivo o la tarea principal en el centro, podemos empezar a sacar ramificaciones en las que se especifiquen las distintas tareas y subtareas que hay que desarrollar para cumplir el objetivo.
- Tomar notas. Es una forma muy práctica y rápida de tomar notas. Así, cuando termines de tomar las notas correspondientes, tendrás toda la información perfectamente esquematizada, sabiendo qué es lo más importante.
- Generar y desarrollar ideas. Es una forma excelente de hacer los llamados brainstomings o lluvia de ideas.
- Aprender de forma más efectiva. Si al estudiar realizas mapas mentales organizando y destacando los puntos más importantes, tu cerebro recordará mejor cuáles son estos aspectos así como su jerarquía.
Cómo se hacen
Principalmente hay dos formas de hacer un mapa mental.
La primera es como se ha hecho siempre, es decir, con papel y lápiz. Al hacerlo de esta manera es recomendable utilizar colores y distintas formas de ramificaciones para que se vea aún más claro la jerarquía de las ideas.
La segunda forma es mediante herramientas digitales. Algunas de estas herramientas que están disponibles de forma gratuita son bubbl.us, Coggle y GoConqr. Pero hay muchas más en internet, así que si estas opciones no te convencen, sigue investigando que seguro encontrarás la herramienta idónea para ti.
Ventajas
Encontramos multitud de ventajas por las que pasarnos a los mapas mentales. A continuación os damos las que para nosotros son más destacables:
- Es muy sencillo hacer los mapas mentales, ya que se basan en sacar ideas claves a partir de una idea principal. Simplemente hay que dejar la mente y la creatividad fluir.
- Se ahorra mucho tiempo utilizando esta técnica. Imagina la diferencia en tiempo y materiales de coger apuntes escribiéndolos o haciendo un mapa mental.
- Funciona como el cerebro. La forma en la que se estructura el mapa es muy similar a la manera de pensar de nuestro cerebro.
- Reduce al mínimo las ideas para que se quede lo realmente relevante.
- Separa ideas principales de secundarias. Al ir desarrollando ramas y subramas de ideas, se hace muy fácil ver cuáles son las ideas principales y cuáles las secundarias. Así se consigue priorizar lo más importante.
- Mejora el estudio. En el proceso de escribir y relacionar las ideas, el cerebro va asimilando esos conocimientos. Es más sencillo recordar las conexiones entre las ideas de esta manera.
- Es una técnica primordialmente visual por lo que ayuda a entender el contenido de un solo vistazo.
Como hemos visto, los mapas mentales son muy útiles tanto para mejorar el proceso de estudio como para llevarlo al ámbito empresarial. Esta técnica tiene muchas maneras de ser usada y a la vez muchas posibilidades. ¿Te atreves a empezar a usar los mapas mentales? Déjanos tus comentarios sobre esta técnica.